La ministra de las Culturas, Julieta Brodsky, en compañía del ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, detalló el plan de acción que se implementará en la Zona Típica de Castro, entre las cuales destacan el fortalecimiento de la Oficina Técnica Provincial del Consejo de Momumentos Nacionales, priorizando la contratación de profesionales locales, capacitados en el tratamiento de zonas típicas.
También se explorará la emisión de una resolución que habilite a la Oficina Técnica Provincial para revisar modificaciones menores en las viviendas. Además, se elaborará un expediente de manera participativa con la comunidad, para implementar Normas de Intervención y Lineamientos de Manejo de la Zona Típica, contemplando la diversa arquitectura de la zona, manteniendo para esto reuniones quincenales con la Secretaría Técnica del Consejo de Monumentos Nacionales y las juntas de vecinos que habitan estas hectáreas. La Oficina Técnica Provincial deberá generar una campaña de sensibilización y comunicación en torno a lo que implica esta declaratoria.
Tras su reunión con algunos representantes de la comunidad la Secretaria de Estado dijo entender la preocupación de los vecinos.
Pese a los anuncios, los vecinos del casco histórico no quedaron satisfechos, Julio Candia, presidente de la Cámara de Comercio de Castro le manifestó la molestia de los vecinos a la ministra por la polémica declaratoria.
La declaratoria de esta Zona Típica es, además, uno de los compromisos del Estado de Chile con Unesco, con el que se garantiza la protección del valor universal excepcional definido para el Sitio de Patrimonio Mundial, declarado el año 2000 y que incluye a 16 iglesias del archipiélago, sin embargo, desde el año 2000 a la fecha no se ha elaborado ningún reglamento para su cuidado.