Un túnel subacuático en el río Valdivia. Esa es la inédita propuesta que dio a conocer ayer, en la ciudad, el ministro de Obras Públicas, Juan Andrés Fontaine, como reemplazo del puente fijo Torobayo-Las Mulatas, proyecto que fue desechado debido a su baja rentabilidad social, por impedir la navegación.
Dicho túnel sería el primero de su tipo en el país y permitiría el paso de vehículos y camiones, conectando la ciudad con la zona costera, y a la vez mantendrá la navegabilidad de los grandes navíos por el cauce. Ejemplos en el mundo existen: China inauguró en 2012 el túnel subfluvial que cruza el río Yangtsé (3 km); y en 1969, Argentina inauguró el suyo en el río Paraná (2,4 km).
Contrario a lo que sucede con la autopista Costanera Norte -que se ubica bajo el río Mapocho, en Santiago- el puente subfluvial planteado en Valdivia iría sobre el lecho del río homónimo, compuesto por diferentes secciones de hormigón armado.
“Hemos iniciado en el Ministerio de Desarrollo Social el proceso de evaluación de una fórmula alternativa, que no es el puente originalmente pensado (…) que consiste en un túnel sumergido, de hormigón armado en la ribera, fórmula que se ha utilizado profusamente en Europa, Asia, en EE.UU. y también en América Latina”, dijo el ministro, aclarando que “la única otra alternativa para conciliar” la conectividad vehicular sin entorpecer la navegación de grandes barcos “sería un puente basculante. Preferimos no intentar de nuevo esa solución”.
Fontaine explicó que, actualmente, este túnel subfluvial se encuentra en la etapa de cuantificación de costos para “efectos de la evaluación económico social”, mientras que en paralelo se iniciará “un estudio técnico para asegurar con opinión experta extranjera, la plena seguridad de la utilización de tal fórmula constructiva”.
Con todo, se estima que el costo de este proyecto ascendería a US$ 66,9 millones.
En cuanto al puente Torobayo-Las Mulatas, Fontaine afirmó que “constatamos que ese proyecto no estaba bien diseñado, por cuanto tenía una altura de solo 18,5 metros, lo cual impide la navegación fluvial por el río. Corregir eso significaba aumentar fuertemente la inversión, y eso significaba que el proyecto dejaba de tener la rentabilidad social que se exige”.
Mariana Concha, directora general de Obras Públicas, explicó que este túnel -por norma- permitirá solo el tránsito de vehículos motorizados. Pese a ello, aclaró que se considerarán diferentes opciones para permitir el cruce de peatones y ciclistas. Confirmó, además, que en dicha zona del río -que posee un ancho que va entre los 150 y 200 metros- se mantendrá una barcaza para fines principalmente turísticos.
La senadora de la zona, Ena von Baer (UDI), calificó esta idea como “una solución distinta, que se puede realizar, que ambientalmente es mucho menos invasiva que un puente y que nos va a permitir tener conectividad, y que al mismo tiempo nuestro río siga siendo navegable en esa zona”.
Fuente: Emol