Se trata de un programa a nivel nacional que se realiza durante los meses de enero y febrero por parte del Ministerio de Desarrollo Social y el Instituto Nacional del Deporte, donde la Policía de Investigaciones desarrolla instancias educativas con el objetivo de evitar las agresiones sexuales en los niños y adolescentes, que son hijos de madres temporeras, explicó, el Comisario Claudio Quezada del Departamento de Apoyo y Acción Comunitaria de la PDI.
Además, el Comisario sostuvo que la responsabilidad de este departamento de la PDI, consiste en entregar las herramientas necesarias a los menores para ellos puedan actuar ante una eventualidad que sean abordados por un familiar o desconocido.
El ciclo de este programa que inició en la capital regional y finaliza en la comuna de Puerto Octay, continuará hacia la región de Los Ríos.