Un lavativo Chile, cuyo máximo emblema de entrega tuvo que entrar en el segundo tiempo, para anotar el descuento y más encima, contagiar de sangre a un grupete de jugadores tibios y de escaso pundonor cuando visten la tricota de la Roja.
Se trata de Arturo Vidal, quien con su desparpajo habitual, algo maquilló a una Selección Chilena que tenía muchas caras nuevas y solo dos históricos, como Gary Medel y Charles Aránguiz.
Por su parte, Uruguay siempre fue superior. Los extremos, Darwin Núñez y Nicolás de la Cruz, fueron un problema insalvable para la retaguardia chilena, donde el Pitbull poco pudo hacer ante el festival de errores que fue Guillermo Maripán, cuyo desempeño en el equipo de todos, es notoriamente más bajo que su nivel en el Mónaco de la liga francesa.
La apertura de la cuenta fue obra de Nicolás de la Cruz a los 38′. Al filo del primer tiempo, Federico Valverde puso el 2 a 0 con un derechazo inatajable para Brayan Cortés, que cabe destacar, fue uno de los pocos rescatables de Chile. Es más, evitó un par de goles celestes que hubieran transformado el duelo en una goleada de proporciones.
En el complemento, las vacilaciones no terminaron para Chile. Nicolás de la Cruz puso el 3 a 0 y Arturo Vidal, tres minutos después, logró el único descuento nacional.
El resto del partido fue netamente proteger la retaguardia, salvo un par de llegadas providenciales del elenco del Toto Berizzo, que no fueron mayor peligro para los locales.
Triste, pero esperable debut de Chile en las clasificatorias al Mundial 2026, donde el camino promete ser muy, pero muy pedregoso para la Roja. El próximo partido ante Colombia será este martes, a las 21:30 horas, en el Estadio Monumental.