El viernes fue un día complejo en Carabineros. La salida de la institución del jefe nacional de Orden y Seguridad, el general Christian Franzani, por su presunta vinculación al caso Catrillanca, en que se indaga su visita a la Región de La Araucanía, el mismo día en que los funcionarios imputados de homicidio declararon en la fiscalía, tocó distintas sensibilidades al interior de la policía uniformada.
Franzani, hombre cercano al general director, Hermes Soto, salió por expresa petición del Ministerio del Interior. El jefe de Orden y Seguridad perdió la confianza del gobierno luego de los reiterados cambios de versión de los formalizados por la muerte del comunero Camilo Catrillanca, el 14 de noviembre pasado. La gota que rebasó el vaso fueron las palabras del sargento Carlos Alarcón, quien a través de un video dijo que lo habían obligado a mentir.
La intervención de Interior en las decisiones de Carabineros no tienen conforme al mando institucional. Es por eso que el viernes, mismo día de la salida del general Franzani, el general inspector José Rivera también presentó su renuncia a Carabineros, la décima desde que estalló el caso tras el fallecimiento de Catrillanca.
El general Rivera era hasta el viernes el jefe de la Zona Metropolitana. Se trata del hombre a cargo de los servicios policiales en todo Santiago, y sexto en la línea de mando de la institución. Sin embargo, con la salida de Franzani, el general Rivera quedó al mando de Orden y Seguridad de manera interina, como subrogante.
Rivera le comunicó su decisión de renunciar al general director el viernes pasado, en la Escuela de Oficiales de Carabineros, ubicada en Providencia. El general Soto, sin embargo, le pidió postergar su salida hasta el miércoles, para que no se produjera antes de la interpelación al ministro Chadwick, mañana en la Cámara de Diputados.
Fuentes de la institución plantean que podría haber más dimisiones. En la reunión del viernes pasado, el general Soto les dijo a los generales presentes que hicieran una revisión interna de su personal a cargo, y que les comunicaran a los mandos medios que siguieran trabajando con la confianza institucional, pero que si querían dar un paso al costado, estaban en su derecho de hacerlo, siempre y cuando fuera el miércoles.
Fuente: La tercera.
Imagen: Cooperativa.