El desempleo en el mes de junio tocó el 11,5% de acuerdo a la encuesta mensual que está realizando el Centro de Estudios Longitudinales de la PUC a propósito de la pandemia. Se trata de una leve subida respecto a mayo (11,2%), debido a que la cifra «se ha contenido por la enorme caída en la participación laboral», explicó el director del centro, David Bravo.
«Los datos lo que indican es que no hemos tocado fondo todavía en el deterioro en el empleo, porque hemos tenido una proporción mucho mayor de personas confinadas y eso, como consecuencia, trae un deterioro en la situación laboral», explicó el economista en la presentación del informe.
En ese sentido, Bravo expuso que la participación laboral ha caído un 20% en un año y que, según el sondeo, hay un total de 1,1 millones de personas inactivas (que no están ocupados ni buscando trabajo) que declaran que si no estuviéramos en la actual crisis sanitaria, sí estarían buscando empleo.
Ese universo de personas, de acuerdo a su análisis, si estuvieran buscando trabajo «le pondría una presión gigante al mercado laboral y precisamente es lo que hace que la tasa de desempleo sea particularmente frágil hoy como indicador».
De hecho, proyectó que de no ser por la inactividad de esos trabajadores, la tasa podría ser de 25 o 28%. Y ante la pandemia y los confinamientos, la encuesta relevó un aspecto en particular: el teletrabajo y su evolución durante los tres meses en los que se han realizado cuarentenas.
Así, mientras las horas trabajadas a nivel nacional registraron una fuerte contracción en junio, en el grupo específico de aquellos que están haciendo home office las horas han aumentado.
Horas trabajadas y teletrabajo
Al comparar las horas semanales trabajadas en la última semana de junio con las que usualmente se trabajaban antes de la crisis del covid-19, la encuesta evidenció una fuerte baja: si en junio el promedio fue de 28 horas y la mediana de 36, antes del virus los ocupados laboraban un promedio de 43 horas con una mediana de 45.
«Hay una fuerte contracción en las horas trabajadas en la semana (…). Sin embargo, la disminución es mucho mayor si se considera que después de la crisis hay 2,1 millones menos de ocupados, es decir, que antes trabajaban 43 horas promedio semanales y ahora trabajan 0 horas», dice Bravo.
En cuanto al teletrabajo, el sondeo mostró que un 25% de los ocupados actuales trabajó remotamente (unos 1,7 millones de personas), por sobre el 24,8% de mayo y por encima del 23,7% de abril.
Y ¿cuántas horas trabajan los que están en modalidad teletrabajo?:
«En abril el promedio era de 31 horas semanales y una mediana de 35; en mayo el promedio subió a 33 horas y la mediana a 40; ahora en junio el promedio escaló a 35 y la mediana se mantuvo en 40 horas», expuso el experto laboral.
Es decir, del total de personas que actualmente están trabajando de forma remota, la mitad (unos 850 mil) trabaja más de 40 horas semanales.
El perfil de los «teletrabajadores»
Bravo hizo especial énfasis en los datos recabados por la encuesta que exponen que «los hombres trabajan significativamente menos que las mujeres en modalidad teletrabajo», en el sentido de que hay más mujeres haciendo trabajo remoto que hombres.
De acuerdo a las cifras, la proporción de hombres ocupados que realiza teletrabajo fue de un 20,8%, mientras que la de las mujeres fue de un 30%. Asimismo, en el tramo etario 35-44 años, un 29,5% hizo home office; en el de 25-34 lo hizo un 26,5%; y en el de 45-54 el porcentaje alcanzó el 24%.
Respecto a las zonas del país, la Región Metropolitana es el lugar donde más personas teletrabajando (un 32,8% del total de ocupados de dicho lugar), seguida por la zona centro (19,5%), el sur (17,7%) y el norte (17,1%).
Otro punto destacado por el economista, el cual tildó de «bien dramático», es que el 60% de las personas que teletrabajan tienen formación universitaria y poco más del 30% tiene educación superior técnica.
Sin embargo, las personas que sólo tienen educación media completa superan ligeramente el 10% del total y «muy por debajo están todos aquellos trabajadores, que son una masa bien importante de personas, que tienen educación básica o media incompleta».