Distintas son las instancias a través de las cuales el municipio y sus concejales han tomado claro conocimiento de las operaciones de Ecoprial en la última década, como lo demuestran documentos públicos.
El proyecto de Planta de Disposición Final de Residuos Industriales Ecoprial fue seguido de cerca por la Municipalidad de Osorno desde el mismo año de la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental por parte de la Conama, en 2008, como consta en varios documentos públicos.
Así consta en los diferentes documentos públicos acumulados en la última década, comenzando por el Ordinario 155 de fecha 21 de febrero de 2008 en que el entonces alcalde subrogante, Jorge Tejeda, realizó cinco observaciones al, a esa fecha, secretario ejecutivo de la Conama, Nelson Bustos, entre las cuales se contaba “que el proponente deberá cumplir con la Ordenanza Nº83 del Sistema de Gestión Ambiental de la I. Municipalidad de Osorno de fecha 24 de julio del 2007”.
Junto a lo anterior, la Municipalidad consultó si el titular del proyecto recepcionaría residuos de comunas distintas a Osorno; si el gas que emanaría de las operaciones emitirá olores a la atmósfera y qué medidas se contemplarán para mitigar el impacto al ambiente; además de cómo los lodos del proceso de deshidratación serían conducidos a un estanque; qué capacidad tiene este, y el detalle de las medidas para evitar que ingresen aguas lluvias.
Tras las respuestas a estas observaciones, con fecha 1 de julio de 2008, el entonces alcalde Mauricio Saint-Jean procedió a efectuar otras seis puntualizaciones. Entre las más relevantes se contaba cómo el titular determina cantidad de vehículos si en su proyecto establece que recepcionarán residuos de cualquier comuna; y qué medidas de mitigación tomara la empresa para evitar la generación de olores a la atmósfera.
Con fecha 23 de octubre, una vez que el proyecto Ecoprial dio respuesta a las 11 observaciones, el municipio procedió a otorgar la conformidad “basada en el pronunciamiento de la Secretaria Regional Ministerial de Salud, a través del Ord. Nº583 de fecha 02 de julio del 2008, donde se señala que «el Proyecto en cuestión no necesita ser presentado a través de un E.I.A”.
En el año 2011, la Municipalidad de Osorno tomó conocimiento del proyecto de mejoramiento de la planta de Ecoprial, efectuando 11 observaciones que llevan la firma del alcalde Jaime Bertin, entre las cuales destacan algunas que demuestran el conocimiento del tipo de lodos que se tratan en el lugar.
Es así como el Ordinario 168 del 17 de febrero de 2011, pedía especificar “si los lodos, entrarán hidratados o deshidratados, en el caso que entren hidratados indicar como se efectuará la deshidratación de estos, ya que, el compostaje no es un sistema muy eficaz para la deshidratación”. También se solicitó “incluir diagrama de flujo con mayor detalle del proyecto de compostaje, ya que, no se indica la captura de lixiviado ni del gas para su quema. Además falta diagrama de flujo para el caso de la digestión anaeróbica” y “mayor detalle del sistema de ventilación. Además de indicar medida para impedir que en las tuberías agujereadas ingrese el líquido lixiviado”.
El 15 de julio de 2011, mediante oficio 663 firmado por Jaime Bertin se realizaron tres nuevas observaciones menores, una vez que se habían zanjado las otras 11. Un nuevo oficio de fecha 28 de marzo de 2012, efectuó las últimas dos observaciones y tras ello, el proyecto de mejoramiento fue aprobado.
LAS MALAS NOTICIAS
Hace cuatro años, Ecoprial comenzó a dar malas noticias. Tras detectar diversos incumplimientos en su funcionamiento, el Superintendencia del Medio Ambiente, determinó formular cargos contra la empresa de residuos industriales situada en el Km 6 de la ruta U-400 al mar, en el sector de Curaco, de la comuna de Osorno.
Y es que entre los años 2014 a 2016, la SMA efectuó las respectivas fiscalizaciones, de manera conjunta con la Seremi de Salud, sumado a los antecedentes también remitidos por el Servicio Agrícola y Ganadero, SAG, habiéndose registrado 11 infracciones imputadas a la empresa, tales como no exigir los análisis químicos ni el porcentaje de humedad de los lodos recepcionados, no contar con filtro de prensa tornillo para deshidratar lodos, disposición de lodos en lugares no autorizados, entre otros.
Aplicadas las multas correspondientes, en la actualidad la vista al Sistema Nacional de Información de Fiscalización Ambiental relacionado con Ecoprial, arroja la siguiente estadística:
– Denuncias 30
– Denuncias consideradas 11
– Fiscalizaciones realizadas a partir de estas 1
– Sanciones: cero.
¿Podrá decir ahora alguna autoridad municipal que se desconocían detalles del proyecto y trabajo de Ecoprial, empresa de la que han estado al tanto de sus operaciones paso por paso?
Los documentos públicos hablan por si mismos. Aquí, nadie puede decir, que «se enteró por la prensa»…