El papa Francisco recordó este domingo el 40° aniversario del Tratado de Paz y Amistad entre Argentina y Chile, firmado gracias a la mediación de la Santa Sede, y lo presentó como un modelo de diálogo para resolver los conflictos actuales en Oriente Medio y Ucrania. Durante el rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro del Vaticano, afirmó que este acuerdo demuestra que “cuando se renuncia al uso de las armas y se da el diálogo, se hace un buen camino”.
Recordar que el pontífice presidió el lunes pasado una ceremonia en el Vaticano para conmemorar este hito que evitó un conflicto armado entre los dos países por la disputa del canal de Beagle. En su discurso, Francisco agradeció la paz y cooperación alcanzada entre las naciones y expresó su deseo de que este ejemplo sea “un modelo a imitar” para resolver crisis internacionales. Al evento asistieron el canciller chileno, Alberto van Klaveren, y el embajador argentino ante la Santa Sede, Pablo Beltramino.
El Tratado, firmado el 29 de noviembre de 1984, puso fin a una disputa territorial que había llevado a Argentina y Chile al borde de la guerra, alcanzando una solución digna y equitativa. El papa destacó cómo la intervención de Juan Pablo II logró evitar el enfrentamiento entre “dos pueblos hermanos” y subrayó la importancia de seguir profundizando en el camino de paz para el bienestar mutuo.
Francisco utilizó este aniversario para renovar sus llamados a la paz en los conflictos actuales, insistiendo en que el diálogo y la cooperación internacional son las herramientas más efectivas para superar tensiones y construir soluciones duraderas. El mensaje subraya la vigencia de los principios de entendimiento y mediación en un mundo marcado por crisis humanitarias y territoriales.