La tarde del jueves, un estudiante de 16 años se autolesionó en el patio del Liceo de Santa Cruz, en la Región de O’Higgins, hecho advertido por un auxiliar del establecimiento, quien activó el protocolo de emergencia del establecimiento.
El disparo que hoy mantiene al adolescente en estado grave y conectado a ventilación mecánica, levantó nuevamente la alerta de preocupación por la salud mental de los niños, niñas y adolescentes (NNA).
Sin embargo, por ley cada establecimiento puede tener un máximo de tres encargados de convivencia escolar, aunque no se considera el número de estudiantes, ni la realidad de cada colegio.
“Los establecimientos sobretodo públicos tienen cargas de enfermedades mentales mucho más altas que otros establecimientos. Ahí uno tiene que darse cuenta que durante la pandemia no hemos sido capaces de hacernos cargo de esta realidad”, explica el psicólogo Alberto Larraín.
Con el foco puesto en la salud mental de los estudiantes es que el Ministerio de Salud (Minsal) implementó en junio de 2020 “SaludableMente”, programa que cuenta con 92 psicólogos y un equipo de acompañamiento.
Hasta la fecha dicho programa ha recibido más de cuatro mil llamadas telefónicas y 811 videollamadas de menores de edad, que en muchas casos han sido atendidos en más de una oportunidad.
Además, ante las distintas situaciones de violencia varios colegios han optado por implementar jornadas reflexivas, talleres y dinámicas que, según los expertos, deben adecuarse a formatos que capten la atención de las y los alumnos.
El Colegio de Profesores aseguró que es “fundamental la intervención del Estado y el Ministerio de Educación” para entregar un apoyo real a la salud mental, mientras que el Gobierno ya fijó como prioridad este ítem con especial foco en los niños, niñas y adolescentes.
Fuente: CNN Chile