Como dicta la tradición republicana de nuestro país, el Presidente de la República, Gabriel Boric, realizó su segunda Cuenta Pública de cara al país, con un llamado a la unidad nacional, pero, con una sentida autocrítica respecto a temas de seguridad, educación, entre otros.
Durante su alocución en el edificio del Congreso Nacional, el Primer Mandatario comenzó reconociendo que la burocracia en el aparato estatal, muchas veces, complica los avances e instó a todo su equipo de gobierno, en todo el país, a desplegarse más en terreno y no tanto en las oficinas.
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Asimismo, en materia de seguridad y crisis migratoria, Boric mencionó su agradecimiento a las Fuerzas Armadas y Carabineros, por ser parte de la solución al control público en la zona de la Araucanía y en la frontera norte de Chile, además de un proceso de control biométrico, y la creación del Ministerio de Seguridad Pública, al que se le pondrá discusión inmediata.
También, en asuntos de salud, hizo mención a la gratuidad en el acceso a la salud pública a través del Copago Cero a los usuarios de Fonasa, además de 15 centros de salud mental comunitaria en todo el país, entre ellos, el de Quellón en la Isla Grande de Chiloé.
Para la Región de Los Lagos, se anunció el tren Llanquihue – La Paloma, dentro de un plan de trenes de cercanía 30-30.
Pasadas las 3 de la tarde, después de 3 horas y 39 minutos, finalizó el discurso de Presidente Boric, el cual se transformó en el más extenso desde el retorno a la democracia, en 1990. El más largo fue el de 1993, con 190 minutos.