Gracias a vecinos, la organización Chiloé Silvestre, dedicada entre otras labores a la rehabilitación de fauna nativa, recibió la alerta de una ejemplar de pudú que había sido atacada por perros en el sector rural de Choen, comuna de Quemchi.
Al recibir al animal en sus instalaciones, lograron determinar que estaba preñada de dos crías. Pese a los esfuerzos del personal, tanto la pudú, a pocos días de dar a luz, como sus mellizos fallecieron a horas de su llegada al lugar.
Javier Cabello, fundador y presidente de Chiloé Silvestre, expresó que constantemente reciben a pudúes que han sido atacados por canes. Detalló que este año han recibido 50 ejemplares de esta especie, y que en general, el 80% de los pudúes que llegan al centro han sido atacados por perros. De hecho, tan sólo en el mes de noviembre han recibido 6 de estos pequeños ciervos nativos heridos por esta causa.
Destacó además que la legislación actual no ofrece garantías de protección a la fauna silvestre, especialmente considerando que la mayoría de los ataques son producto de perros que tienen dueño.
Por su parte, Juan Carlos Viveros de Defendamos Chiloé calificó este episodio como «la gota que rebalsó el vaso».
Cabe mencionar que los ataques directos no son la única forma en que los perros puede dañar un ecosistema, ya que también son vectores de transmisión de parásitos y enfermedades infecciosas. Además, existe el riesgo latente de ataques a ganado, como ha ocurrido por ejemplo en la Isla Maillen de Puerto Montt.