Tras presentar su renuncia al sacerdocio, la cual fue aceptada por el Papa Francisco, el Presbítero Darío Nicolás Serrano no seguirá siendo investigado por la Iglesia Católica por presuntos delitos de abuso sexual e incorrecta gestión administrativa económica en la Arquidiócesis de Puerto Montt.
El primer caso obedece a una denuncia que fue recibida el año 2018 por “abusos sexuales de menores de edad” que se remontan a la década de 1990.
Posteriormente, se inició una investigación en su contra por incorrecta gestión administrativa económica en la Arquidiócesis de Puerto Montt. Así lo explicó el Arzobispo de Puerto Montt, Fernando Ramos.
El Arzobispo de Puerto Montt añadió que tras ser expulsado del sacerdocio, Darío Nicolás no puede administrar sacramentos ni tener responsabilidades pastorales.
De igual forma, una vez que fue expulsado del ministerio sacerdotal, tampoco puede ser juzgado por la iglesia católica, pero sí por un tribunal civil, dijo el Arzobispo Ramos.
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La dimisión del Presbítero Darío Nicolás se suma a la de Tulio Soto Manquemilla, investigado por delitos canónicos en la gestión administrativa de la Arquidiócesis de Puerto Montt.
Entre los delitos que se le imputan a este ex sacerdote, está su auto contratación para aumentar su sueldo, la realización de préstamos con dinero que pertenecían a la institución y el retiro de manera irregular de psicotrópicos desde un Cesfam administrado por la Iglesia Católica.
Los antecedentes de ambos procesos están en poder del Ministerio Público, instancia que debe evaluar las eventuales responsabilidades penales de los exsacerdotes.
