Sago Fisur: un espacio para la unidad agropecuaria

505

En las últimas semanas hemos visto constantes llamados a la unidad de parte de diferentes autoridades, declaraciones que más tarde se desvanecen entre nuestras copiosas nubes, porque no es fácil ceder para llegar a acuerdos.

Más allá de las legítimas posturas de cada uno, el bien común debiera ser el norte de nuestra sociedad.  Para ello, es necesario que podamos visualizar claramente cuales son los pilares que anclan nuestra geografía, cultura, creencias, valores, visión de futuro, e incluso los arquetipos que nos unen. Todo lo anterior es la base del concepto de comunidad.

Podríamos entonces centrarnos en la Comunidad del Campo.  Sabemos que una característica de la ruralidad es la atomización y dispersión de sus actores.  Sin embargo, al conversar con agrupaciones de productores e industria en diferentes regiones, existen más temas en común de los que podríamos pensar: sociales, productivos, económicos y ambientales.

¿La unidad se produce al transformarse en tema de debate?  Al parecer no es así.  Requiere que las acciones vayan de la mano con los anhelos.  Y ambos conceptos, unidad y comunidad, están presentes desde hace muchos años a nivel rural.  Ese fue el motor para que en 1917 nuestro gremio realizara la primera versión de Sago Fisur: una ventana abierta al público y a las familias del campo y la ciudad, que éste 2023, entre el 23 y el 26 de noviembre, congregará a expositores de animales provenientes desde la Región de la Araucanía hasta la de Magallanes. Una instancia que permite también acoger y mostrar las tendencias de vanguardia en tecnología, y el valor de empresas locales de economía circular.

Esta muestra, que ya no es solo de Sago, sino de toda la gente del sur de Chile, representa no sólo un espacio para el intercambio comercial de bienes y servicios. Arraiga en su esencia los valores más desinteresados de nuestros socios fundadores para que cualquier persona, agricultor o visitante, pueda empaparse y enorgullecerse de nuestro avance genético animal, los cultivos, innovación en alimentos, maquinaria y servicios. Es así como el mundo gremial cobra sentido: una completa entrega personal para el bien común.

Sago Fisur es el espacio en el que las barreras de nuestros juicios se derriban: productores grandes y pequeños, de diferentes regiones, se encuentran entre sí, se relacionan con otros eslabones de la cadena, y con toda la comunidad. Un puente con el mundo urbano y la construcción tangible de redes que materializan un paso hacia la unidad rural.