Medidas precautorias y de contingencia son las que está adoptando la industria, debido a que en la temporada estival se dan las condiciones favorables para el surgimiento de estos eventos de carácter masivo, conocidos como “Marea Roja”, generando posibles efectos negativos a nivel ambiental, en la comunidad y en la salmonicultura.
Ante la proximidad de la estación donde proliferan estos eventos que pueden generar consecuencias negativas en la población con impactos que van desde intoxicaciones en seres humanos, hasta mortalidades masivas de peces, las empresas salmonicultoras chilenas han reforzado una serie de resguardos en la macrozona sur, así lo sostuvo, Loreto Seguel, directora ejecutiva del Consejo del Salmón.
La representante del gremio salmonicultor, señaló que en la práctica, las empresas socias del Consejo del Salmón, están actualmente fortaleciendo procesos en los centros de cultivo con un enfoque preventivo.
Una de las acciones que se están adoptando tiene que ver con el monitoreo. Esto se traduce en mantener una vigilancia constante en los centros de cultivo de salmón para detectar la presencia de algunas de estas especies nocivas y planes de contingencia ante posibles eventos.
También las empresas han reforzado la creación de áreas de trabajo dedicadas a la vigilancia ambiental, la instalación de laboratorios de monitoreo in situ, y la incorporación de tecnología de punta. Desde el gremio agregan que se avanzará en reforzar también la coordinación con las autoridades regionales de la macrozona sur para abordar estos eventos que en esta temporada se presentan con mayor fuerza.