Poco más de tres mil metros cúbicos de desechos domiciliarios sólidos (basura) adicionales, al año, podría recibir dentro de los próximos meses el vertedero municipal de Curaco, ubicado en el kilómetro 8 de la ruta u-400 al mar en la comuna de Osorno.
Ello, como consecuencia de los graves problemas que tiene la corporación edilicia de Río Negro, que no cuenta con un lugar autorizado que reúna las exigencias mínimas para su funcionamiento y por años ha generado serios problemas para toda la comunidad desde contaminación e incendios.
De acuerdo a lo señalado por el presidente de la comisión del medio ambiente, Francisco Reyes, con el arribo de los desechos provenientes de la comuna de Río Negro al vertedero, serán en total siete las comunas que depositarían ahí sus residuos, lo que, sin duda alguna, reducirá más la vida útil de este colapsado terreno.
Reyes ofició a la Superintendencia de Medio Ambiente para que informe del proceso sancionatorio abierto, a propósito del proyecto incendio en la comuna de Río Negro, y al intendente Harry Jürgensen para una actualización de la actual situación del fracaso proyecto de relleno sanitario de Curaco en Osorno.