Durante la última jornada, la Superintendencia de Electricidad y Combustribles (SEC), emitió un informe dando cuenta de que entre enero e inicios de mayo de este año ya se han contabilizado 186 instalaciones de gas que que han recibido el «sello rojo» por considerarse peligrosas o ineficientes, por ende, resulta prioritaria su reparación.
Dicha cifra, cuestionada por muchos, ha sido catalogada como »poca» para la SEC provincial, considerando que dicho estudio es cada dos años, y lo más probable es que ya estén subsanados los desperfectos que arrojaron estos datos negativos.
Al respecto, el encargado provincial de la SEC, Alberto Hoffman, comentó que es poca la cantidad de edificiones que han obtenido el conocido »sello rojo», y más destacan los »sellos verdes» que alcanzan más de 4 mil a nivel nacional.
Asimismo, el representante hizo un llamado a la calma, ya que estadísticamente siempre, según su experiencia, siempre es preocupante que un recinto tenga sello rojo, sin embargo, hay diferentes criticidades que significa tener esta alerta, lo cual no necesariamente significa estar en peligro de muerte.
Respecto a otros datos obtenidos, se mencionó que durante el mismo periodo, igualmente se registraron 429 viviendas con «sello amarillo», lo cual significa estar como «pendiente» por considerarse medianamente riesgosas y que también requieren arreglos obligatorios.
Asimismo, según se dijo, cabe tener como dato que los factores de peligros surgen en edificios de más de 50 años debido a la antigüedad de sus instalaciones, y además por el desconocimiento de la población de la «recertificación» obligatoria que deben tener dichos establecimientos.
