El seremi saliente, Nicolás Céspedes, conversó en su último día de gestión con Radio Sago, aclarando que el problema que presentó la Línea 3 fue la baja en el número de boletos cortados diariamente en el recorrido que llegaba a Ovejería comparado con el servicio ofrecido en Rahue por la misma empresa.
Aquella merma, de entre 100 a 150 boletos diarios por máquina, fue determinante para no aceptar seguir realizando el recorrido y regularizarlo dentro del Perímetro de Exclusión, dijo Céspedes.
El seremi señaló que solo falta el visto bueno de la unidad legal a nivel central de su cartera para que se apruebe la licitación o trato directo que permita contar con un recorrido para ese sector de la comuna, lo que deberá realizar el o la próxima seremi en la región, lo que podría demorar dos semanas.
Ante las soluciones transitorias que propuso el municipio de entregar una subvención por dos meses a la empresa y la de implementar buses para trasladar a escolares y adultos mayores, sobre esta última, Céspedes fue crítico, debido a que sería algo irregular, e insistió en que la solución está a la vuelta de la esquina.
Consultado por no haber dado esa solución antes de acabar su período en el cargo, Nicolás Céspedes lo atribuyó a la ejecución de los presupuestos del nuevo gobierno como limitante para llevar a cabo las medidas correctivas.
Durante la tarde de ayer miércoles, un grupo de unos 80 vecinos de Ovejería se manifestó en el paso bajo nivel de Inés de Suárez por la falta de locomoción colectiva, anunciando que seguirán movilizados a la espera de respuestas de las nuevas autoridades que asumirán en Transportes.
