La subsecretaria de Prevención del Delito, María José Gómez, reiteró que los delitos de mayor connotación social y los delitos violentos bajaron casi un 14 y 16 por ciento, respectivamente, durante el 2021 y que «nadie puede decir que no hemos hecho la pega».
Pese a que sostuvo que las cifras «son positivas», afirmó que estas no los dejan tranquilos, ya que «la delincuencia siempre será un enorme desafío».
«Nadie podría decir que estamos satisfechos o que solucionamos el problema de la delincuencia», sostuvo a El Mercurio.
La autoridad explicó que existe «un fenómeno que es mundial» al que se enfrentan respecto a la mayor violencia en los delitos. Sin embargo, expresó que sienten que avanzan «en camino que ha dado frutos».
Lo anterior tras una semana donde se registraron varios homicidios que impactaron a la opinión pública, una diferencia en las estimaciones sobre el alza en los homicidios con el fiscal nacional Jorge Abbott, y un emplazamiento de los alcaldes de oposición en la Región Metropolitana.
La autoridad consideró que el tono de la carta enviada por los alcaldes «no se condice con el trabajo colaborativo y coordinado» realizado con ellos.
Así, destacó la «coproducción de seguridad entre las distintas instituciones» vinculadas al sistema de seguridad, donde los jefes comunales «tienen un rol fundamental» por conocer «la realidad de sus territorios». Así también «la implementación como ley del Sistema Stop de Carabineros».
Sobre la baja en las cifras de homicidios manejadas por el Gobierno, indicó que para llegar a esos números se comparó el 2020, año con mayor restricciones, con el 2021, donde se dio el confinamiento. Para abordar la situación de la violencia en los delitos consideraron tres factores que «están incidiendo en la violencia».
Se trata de la existencia de organizaciones criminales, el uso de armas de fuego y el narcotráfico. «Creemos que nadie puede decir que no hemos hecho la pega, que no hemos enfrentado con decisión y frontalidad la violencia», apuntó, agregando que es «una tarea constante».
DESACUERDO EN CIFRAS DE HOMICIDIOS CON ABBOTT
El pasado jueves, el fiscal nacional Jorge Abbott planteó que el alza en los homicidios acercan al país «a la tasa mundial», pese a que el Gobierno detectó una caída del 22 por ciento en el 2021.Según los registros del Ministerio Público, entre 2016 y 2020 hubo un alza de 3,7 a 5,9 asesinatos por cada 100 mil habitantes. Ante esto, la subsecretaria dijo que «cuando el fiscal hizo esas declaraciones, probablemente no tenía la información completa».
«De acuerdo a los casos policiales», informados por Carabineros y la PDI, «la cifra de homicidios retrocedió en el 2021 en un 22 por ciento, llegando al mismo nivel que teníamos en 2019».
De esta forma, consideró que «más que una controversia», se está hablando de «conceptos distintos» ya que «el 2020 fue el año que más homicidios hubo, en un contexto de pandemia y de cierre de fronteras», señaló.
Lo anterior, produjo que hubiera «menos droga ingresando al país», generando «un aumento en las disputas entre bandas rivales por los territorios» y en los «ajustes de cuentas en un 28 por ciento».
«Ahí el Ministerio Público tiene un rol que es central», agregó, enfatizando en que «cada institución tiene que asumir su rol, y la responsabilidad del Ministerio Público es investigar».
Además, consideró que «sacar armas de circulación, incautar drogas y desbaratar organizaciones puede tener algún vínculo con la disminución» registrada el año pasado.
Sobre el incremento en la sensación de inseguridad en las personas, sostuvo que es clave «la violencia con que se ejecutan los delitos», provocando temor entre la ciudadanía de «ser víctimas de delitos donde pueden sufrir un daño mayor».
Fuente: Cooperativa