La información fue proporcionada por la sanitaria Suralis, quien detalló que en el trienio 2021-2022-2023, se logró reducir en un 32% las suspensiones no programadas de suministro de agua potable en las comunas de la Provincia de Llanquihue donde prestan servicios, lo que se ha traducido en una disminución de un 41%, en la afectación a clientes.
El gerente de Operaciones de Suralis, Marcelo Cofré, explicó que estos cifras fueron entregadas a la Superintendencia de Servicios Sanitarios y obedecen a una serie de cambios en la gestión operacional de la compañía en los últimos años, que en el caso de las comunas de Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas, Puerto Montt, Maullín, Los Muermos y Calbuco, implicó bajar de 77.036 clientes afectados por suspensiones no programadas en 2021, a 21.080 en 2022 y 45.467 en 2023, dijo Cofré.
En el detalle de las mejoras, se hicieron renovaciones de red, gestión adecuada de presiones en sectores críticos y coordinación con bomberos para manipular grifos en medio de incendios, entre otras.
Por último, desde la sanitaria indicaron que las suspensiones no programadas de suministro son una realidad de las empresas de agua y saneamiento a nivel nacional e internacional, por lo que estas incidencias, si bien no llegarán a cero, deben seguir siendo un motivo de ocupación de los equipos.