Se trata de uno los indicios hallados en el marco de la investigación que impulsó el Ministerio Público, luego que el cadáver de un vecino fuera encontrado el pasado martes 19 de septiembre en el interior de su casa en la población Libertad de Puerto Montt.
El hallazgo fue realizado por un grupo de personas que llegó al hogar de la víctima fatal, que vivía solo, en calle Nueva Oriente N° 194 y quienes denunciaron el hecho en la Quinta Comisaría de Carabineros.
Una vez en el lugar, los efectivos policiales definieron que el residente de 55 años, estaba tendido sobre su cama, con sangre y un golpe en la cabeza.
Vecinos explicaron que se trataba de una persona tranquila, que vivía sin compañía. Señalaron que asistía a una iglesia evangélica del barrio, que no consumía drogas ni alcohol. Pero, revelaron que comercializaba medicamentos que le proporcionaban en el consultorio.
Al mediodía del martes 19, cuando esos compradores golpearon a la puerta se dieron cuenta que nadie los recibía, por lo que ingresaron a la casa. Ahí fue cuando lo vieron tendido en su cama, ya sin vida.
Tras ello dieron aviso a Carabineros, cuyos funcionarios establecieron que el único morador de la pequeña casa, permanecía muerto, lo que fue corroborado más tarde por paramédicos del Samu.
El fiscal Fabián Fernández, quien se hizo presente en el lugar, requirió la presencia de la Sección OS 9 para indagar lo que pudo haber pasado, así como del Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar) para los peritajes.
Sostuvo que el resultado de la autopsia en el Servicio Médico Legal será relevante para establecer o descartar la intervención de terceras personas en la muerte del vecino. Además destacó que en las inmediaciones existen cámaras de seguridad.