En un verdadero vuelco del caso, la novena sala de la corte de Apelaciones de Santiago revocó el fallo dictado por el juez Alejandro Madrid que en enero de 2019 había condenado a seis personas por la muerte del ex presidente Eduardo Frei Montalva, ocurrida el 22 de enero de 1982 en la Clínica Santa María.
Luego de más de una década de investigación, la que quedó plasmada en un fallo de 811 páginas, el ministro en visita había condenado al médico Patricio Silva Garín a la pena efectiva de 10 años de presidio mayor en su grado mínimo por su responsabilidad como autor del delito de homicidio, mientras que había condenado como coautores del mismo delito a Luis Becerra Arancibia (chofer personal del mandatario e informante de la CNI) y Raúl Lillo Gutiérrez (agente civil de la CNI) a la pena efectiva de siete años de presidio mayor en su grado mínimo.
Pero todo eso quedó en nada. En el dictamen del tribunal de alzada conocido este lunes se sostiene que las pruebas del caso no han «logrado demostrar que el fallecimiento del ex Presidente de la República Eduardo Frei Montalva sea imputable a alguna acción dolosa o culposa de uno o más terceros, como tampoco a alguna omisión atribuible a quienes en su condición de médicos se hallaban en posición de garante de su vida atendido su estado de salud».
«Los hechos que se obtienen de estos antecedentes poseen una justificación lógica que torna más que plausible aquélla conforme a la cual Eduardo Frei Montalva no fue víctima de homicidio, sino que falleció como consecuencia de complicaciones médicas», señala el dictamen.
Y se agrega que la intervención realizada a Frei «fue necesaria y correctamente ejecutada o, a lo menos, que no es posible formular a quienes participaron en ella o decidieron el momento de su ejecución, reproche jurídico penal alguno, al no haberse comprobado infracciones dolosas ni culposas a la lex artis médica».
Además de Silva Garín, Becerra y Lillo, el tribunal de alzada absolvió a Pedro Samuel Valdivia Soto, Helmar Rosenberg Gómez y Sergio Javier González Bombardiere.
Por el momento la familia Frei no se ha pronunciado respecto del dictamen, que en todo caso puede ser apelado ante la Corte Suprema.